Pingback y trackback en WordPress: Qué son y cómo se desactivan
Aunque no se trata de tecnologías exclusivas de WordPress, como vas a ver, se encuentran perfectamente integradas en nuestro gestor de contenidos preferido.
En las próximas líneas los conocerás más a fondo y descubrirás si merece la pena usarlos o no.
- Qué es un pingback en WordPress
- Cómo funciona un pingback
- Qué es un selfping
- Cómo desactivar los selfping
- Qué es un trackback en WordPress
- Cómo funciona un trackback
- ¿Necesitas utilizar los pingback y trackback?
- Cómo desactivar los pingback y trackback en WordPress
- Conclusión: Usar o no pingback y trackback
Qué es un pingback en WordPress
Un pingback es un sistema automático de comunicación mediante el cual enviamos un aviso a un sitio web de que ha sido enlazado desde el nuestro.
Este sistema ha permitido relacionar artículos con sus artículos-respuesta en otras webs durante años, especialmente para aquellas personas que han usado un blog como herramienta de comunicación.
Para entenderlo correctamente, voy con un ejemplo que refleja una situación habitual:
Imagina que Juan ha escrito una estupenda entrada sobre nutrición en su sitio web.
María, que es una deportista de alto nivel, lo lee y escribe en su blog personal una entrada donde hace una referencia al post de Juan, añadiendo un enlace a dicho post.
En ese momento, y si ambos blogs cumplen una serie de condiciones que verás más adelante, el sitio web de Juan habrá recibido un pingback, una notificación, de que María lo ha enlazado.
Cómo funciona un pingback
La tecnología detrás de los pingback en WordPress es el protocolo XML-RPC. Se trata de una interfaz que, en nuestro caso, funciona como una API para que las aplicaciones externas puedan interactuar con nuestra web.
Este protocolo ha sido noticia para nuestro CMS en varias ocasiones por su vinculación con ataques a la seguridad de WordPress mediante el fichero XMLRPC.PHP en forma de ataques DDoS.
El proceso que se desarrolla con un pingback es, siguiendo el ejemplo anterior, algo así:
- Juan escribe su entrada.
- María escribe su entrada y enlaza a la de Juan.
- El WordPress de María envía un pingback al WordPress de Juan mediante una solicitud XML-RPC.
- El WordPress de Juan verifica que efectivamente ese enlace existe en la entrada de María.
- El WordPress de Juan añade un comentario en la cola de moderación del post de Juan con el enlace al post de María.
Es probable que hayas leído en otros artículos que una de las características de los pingback es que el comentario que genera automáticamente el sistema, el que pasa a la cola de moderación del post enlazado, solo incluye el título y la URL del post donde se ha hecho la mención.
En realidad, esto no es exactamente así. El comentario creado por los pingback también incluye el extracto del post que nos está enlazando. Lo que sucede es que muy pocos temas para WordpPress deciden mostrar esa información en la plantilla de los posts, como puedes leer en la entrada del codex dedicada a los pingbacks.
Debes tener en cuenta que, para que todo este proceso funcione correctamente, ambos sitios web tienen que tener los pingback activados. Como mínimo, Juan deberá permitir recibirlos y María deberá activar sus avisos.
De otra forma, el proceso se interrumpirá y no se completará la publicación del pingback en forma de comentario en la entrada de WordPress.
Qué es un selfping
Imagina ahora que el artículo enlazado está en tu propio sitio web, es decir, se trata de un enlace interno. Pues esta acción de enlace también genera un pingback desde tu web a tu propia web y en este caso se conoce como selfping.
Efectivamente, tal y como estás pensando es una situación un poco absurda, pero el caso es que es así. La velocidad de carga del post enlazado se verá afectada (mínimamente) porque se tratará de una información extra que habrá que recuperar de la base de datos de WordPress. Seguro que prefieres no sufrir esa situación.
Cómo desactivar los selfping
Para evitar los selfping, se pueden desactivar los pingback en WordPress de manera global, como verás un poco más adelante. No obstante, si solo quieres eliminar estos molestos pingback internos, puedes hacerlo de una forma muy sencilla con una buena práctica.
Cada vez que necesites realizar un enlace interno, utiliza la ruta relativa al post de destino en lugar de la URL completa. Es decir, para un post cuya URL a enlazar sea algo tipo:
en lugar de esa URL, utiliza su ruta relativa:
/mi-entrada-enlazada
Esta práctica, además de ahorrarte los selfpings, te resolverá muchos quebraderos de cabeza si algún día necesitas hacer una cambio de dominio de tu sitio, porque no te obligará a reescribir todos los enlaces internos de tu web.
Si el cambio de dominio te supone algún problema, en Raiola es uno de los servicios especializados WordPress que se ofrecen.
Si prefieres no preocuparte por las URLs e instalar un plugin para resolver desactivar los selfping de WordPress, te recomiendo No self ping. Se trata de un plugin que funciona con WordPress multisites, lo que es muy interesante si gestionas una red de este tipo y no puedes explicar a tus usuarios que usen rutas relativas en sus enlaces internos.
Qué es un trackback en WordPress
Un trackback es un proceso de comunicación muy parecido al pingback pero que se realiza de forma manual y que no supone ninguna comprobación por parte del post enlazado.
En un sentido estricto, se trata de una notificación en forma de comentario que informa en el post original de que se ha creado un post de respuesta. En este caso, dicho comentario suele mostrar el extracto del post pero no se puede certificar que el enlace exista propiamente.
El hecho de que sea manual y no verificado supone su mayor problema, porque se ha convertido en un tremendo foco de spam. La gran mayoría de los trackback que se reciben son de páginas spammers que, además, realmente no te están enlazando.
Además de añadir ruido a tu cola de comentarios, supone un riesgo mayúsculo a tu estrategia SEO. El motivo es que tu post presentará enlaces salientes a sitios de muy baja calidad. Puedes echarle un vistazo a esta guía SEO on page si tienes dudas sobre cómo enfrentar estos aspectos.
Cómo funciona un trackback
Hasta la llegada del editor de bloques a WordPress con la versión 5.0, para hacer un trackback había que introducir en un campo que habitualmente estaba oculto (y, por tanto, había que visibilizar desde las «Opciones de pantalla» en la parte superior del editor) la URL de trackback del post a enlazar.
Puedes añadir tantos trackback como quieras separando las URLs por comas.
Una vez añadido ese campo a nuestra entrada, cuando publicábamos, el trackback se enviaba al post enlazado.
Desde la llegada del editor de bloques, también conocido como Gutenberg, este campo ha desaparecido y no se muestra en las propiedades del documento. Sin embargo, sigue estando en el core de WordPress y podrás verlo si utilizas algún plugin como Classic Editor para recuperar el viejo TinyMCE.
En cualquier caso, su uso es bastante desaconsejable teniendo en cuenta lo comentado anteriormente.
¿Necesitas utilizar los pingback y trackback?
Mi respuesta rápida es NO, no necesitas usar ni pingback ni trackbacks.
Aunque se trata de dos herramientas que hace algunos años tenían bastante sentido y permitían hacer más densa la red de enlaces que constituye internet, lo cierto es que su uso (o más bien su abuso) ha derivado básicamente en spam y en tratar de captar tráfico de sitios web de éxito.
Debes tener en cuenta que tu posición frente a los pingback se define respecto a dos puntos de vista que puedes configurar en WordPress:
- Quiero avisar a los sitios a los que enlazo.
- Quiero añadir comentarios en mis entradas que informen de los sitios que me enlazan.
Puedes escoger uno, otro, ambos o ninguno. Lo que prefieras.
La opción A no te dará ningún trabajo y puede que te permita añadir un enlace a tu web en los comentarios de la entrada de algún despistado.
La opción B puede llenar tu cola de moderación de comentarios de enlaces de sitios web con los que no te interesa relacionarte. También puede que surja alguna relación interesante y una conversación mediante entradas con otro blog, pero serán las menos (desgraciadamente).
En cualquier caso, si decides aceptar los pingbacks esto te supondrá un proceso de revisión manual inevitable para evitar que te la cuelen.
Cómo desactivar los pingback y trackback en WordPress
Las dos opciones que has visto para trabajar con los pingback y trackback pueden configurarse desde tu escritorio de WordPress en la sección Ajustes > Comentarios, donde verás el siguiente ajuste:
El primer checkbox enviará pingback. El segundo activara la recepción y aceptación de pingback y trackback de otros sitios web hacia el tuyo.
- Desmarcar «Tratar de avisar a los sitios enlazados desde el artículo» desactivará tu envío de pingbacks.
- Desmarcar «Permitir avisos de enlaces desde otros sitios (pingbacks y tacbacks) en los artículos nuevos» desactivará tu recepción de pingbacks.
Este ajuste afectará a todas las entradas de tu web. Si prefieres gestionarlo de manera individual por cada entrada, en el menú Entradas > Todas las entradas podrás desplegar la edición rápida de una entrada en concreto y definir su comportamiento particular respecto a los pingback.
Si desactivas estos checkbox particulares de cada entrada, tu WordPress no avisará a otros sitios web que enlaces desde esa entrada en concreto ni tampoco aceptará los pingback que le lleguen a ella.
Existe una tercera opción de desactivación que es usar un plugin. En este caso os recomiendo Disable XML-RPC Pingback. Este plugin deshabilita algunas funcionalidades del protocolo XML-RPC pero mantiene otras que siguen siendo útiles a día de hoy.
En concreto, desactiva aquellas vinculadas al abuso de los pingback y los potenciales ataques a la seguridad de nuestro sitio que mencionaba más arriba pero mantiene otras utilizadas como API para servicios como los de Jetpack que aun usan XML-RPC para conectarse con tu sitio de forma remota.
Conclusión: Usar o no pingback y trackback
Como has podido ver, los trackback prácticamente han pasado a la historia de WordPress y ya ni siquiera Gutenberg los tiene en cuenta por el temor al spam.
Por otra parte, los pingback agonizan y casi nadie está dispuesto a recibirlos y desviar tráfico de su web a la de otros blogueros. No olvides el riesgo de seguridad que pueden suponer y que puedes evitarte con servicios de hosting especializado que incluyan protección contra ataques por fuerza bruta como nuestros servidores web para WordPress.
Desactivar los pingbacks o no es una decisión personal relacionada con el tiempo que estás dispuesto a invertir en su moderación manual tratando de identificar aquellos que te aporten valor.
Va a ser un trabajo arduo, ya te lo adelanto, especialmente si gestionas un blog de éxito. No obstante, quizás te permita identificar buenas oportunidades y establecer relaciones fructíferas con otros sitios compartiendo tráfico.
¿Tú sigues usando los pingback? ¿Los aceptas? ¿Has recibido alguna vez un trackback? Te invito a compartir tu experiencia en los comentarios.
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