One page: ¿Qué es, cuándo usarlo y cómo crear uno paso a paso?
Un one page es de esos formatos que te conquistan en cuestión de segundos. Abres la web y todo está ahí, ante ti, sin menús eternos ni clics que te saquen de la experiencia. Te vas desplazando y todo tiene sentido: breve y perfecto.
Es por eso que es una opción que cada vez gana más terreno en portfolios, páginas de producto, campañas específicas y más, porque concentra la atención y elimina distracciones. Además, cuando están bien hechas, transmiten el mensaje de manera directa y atractiva a la vista.
Por otro lado, no siempre es la solución perfecta. Hay proyectos que se benefician de esta estructura y otros que necesitan algo más amplio. Lo importante es saber en qué casos encaja y, si es el tuyo, aprender a crearlo con orden y estrategia.
Aquí vas a ver qué es una web one page, cuándo conviene usarlo y cómo ponerlo en marcha paso a paso para que quede profesional desde el primer día.
- ¿Qué es un sitio web one page?
- Diferencias clave frente a un sitio web tradicional
- ¿Es lo mismo que una landing page?
- Ventajas y limitaciones del diseño one page
- ¿Cuándo conviene elegir una one page?
- Elementos clave de una web one page efectiva
- Navegación por anclas y estructura fluida
- Llamadas a la acción y flujo de conversión
- Optimización para móviles y velocidad
- ¿Cómo crear una web one page paso a paso?
- Planifica el contenido y la jerarquía
- Diseña cada sección con intención
- Implementa buenas prácticas de diseño UX
- Aplica técnicas básicas de SEO desde el inicio
- ¿Cómo hacer una one page en WordPress?
- Temas recomendados para este tipo de diseño
- Plugins útiles para estructura y navegación
- Consejos para rendimiento y posicionamiento
- Ejemplos inspiradores de sitios one page
- Conclusión: ¿El diseño one page es adecuado para tu web?

¿Qué es un sitio web one page?
Un sitio web one page es, como su nombre deja entrever, una página única en la que se concentra todo el contenido. No hay apartados que te saquen de ahí ni menús con decenas de enlaces, sino un recorrido continuo en el que vas encontrando la información al desplazarte.
Es un formato pensado para que el usuario tenga todo a mano. Sencillo y cómodo, ¿no?
Pues fíjate, como son tan sencillos, este tipo de web se apoya mucho en el diseño visual y en una estructura muy cuidada. El orden de los bloques no es casual: cada sección está colocada para que la navegación sea intuitiva y el mensaje llegue sin rodeos.
Por eso suele funcionar tan bien en proyectos que necesitan captar la atención de forma rápida, como portfolios, presentaciones de producto o páginas de eventos.
Eso sí, que sea "una sola página" no significa que sea más fácil de hacer. Al contrario, hay que pensar muy bien qué contenido incluir, cómo presentarlo y en qué orden, porque no hay otras secciones a las que delegar la información.
Diferencias clave frente a un sitio web tradicional
La comparación con un sitio web tradicional, de varias páginas, es inevitable. Ambos tipos de web tienen su lugar, pero ofrecen experiencias radicalmente distintas.
Una web multi-page permite repartir la información en varias secciones y profundizar en cada tema. Esto da más margen para proyectos grandes, como tiendas online con muchos productos o webs corporativas con distintas áreas.
Ahora, un one page apuesta por concentrar todo en una página. Este tipo de páginas, es más para usuarios minimalistas o que no necesitan (o no quieren) mucho contenido.
Para que lo veas mejor, te lo enseñamos en una tabla:
Característica | One page | Multi-page |
Velocidad de navegación | Rápida: no hay que cargar otras páginas. | Depende de la estructura y del servidor. |
Cantidad de contenido | Limitada: ideal para mensajes concretos. | Amplia: permite desarrollar más temas y secciones. |
SEO | Menos URLs para posicionar, requiere optimizar mucho el contenido único. | Más páginas indexables, mayor potencial de palabras clave. |
Experiencia de usuario | Lineal y guiada, fácil de seguir. | Flexible: el usuario elige por dónde entrar y qué ver. |
Mantenimiento | Más sencillo: un único archivo principal. | Más complejo: varias páginas y plantillas. |
Ejemplos comunes | Portfolios, eventos, presentaciones de producto. | Tiendas online, blogs, webs corporativas amplias. |
¿Es lo mismo que una landing page?
Aunque parecen lo mismo, no lo son.
Y es que una landing page o página de aterrizaje, es una página pensada para cumplir un objetivo muy concreto, casi siempre dentro de una campaña de marketing.
Esta puede estar dentro de una web más grande o ir por libre, y su misión es clara: conseguir que el visitante haga algo específico. Pon tal información, dejar tus datos, por ejemplo, o incluso comprar un producto.
En cambio, un one page es toda la web en sí. No es una página secundaria, sino la estructura completa de la página. Puede tener llamadas a la acción, sí, pero su objetivo es contar toda la historia del proyecto en un único recorrido, no solo conseguir una conversión puntual.
Ventajas y limitaciones del diseño one page
Elegir un diseño one page puede ser un acierto total… o quedarse corto según lo que necesites.
Por eso, antes de lanzarte a maquetar todo en una sola página, conviene tener claro qué te va a aportar y en qué situaciones podría darte problemas. Así podrás decidir con criterio y sin sorpresas después.
Ventajas de tener un one page:
- Experiencia de usuario fluida: aquí el visitante no tiene que saltar de una sección a otra porque todo está en el mismo "recorrido".
- Rapidez de navegación: no hay cambios de página ni cargas intermedias, así que el acceso a la información es casi inmediato. Esto se nota sobre todo en móviles, donde cada clic extra puede hacer que alguien abandone.
- Enfoque claro en el contenido: al tener un espacio limitado, obliga a ir al grano y priorizar lo que realmente importa. Nada de texto de relleno o menús infinitos.
- Diseño más visual e impactante: es habitual que los one page aprovechen el scroll para contar una historia o guiar al usuario de forma creativa. Bien hecho, es un plus de imagen para tu marca.
- Mantenimiento sencillo: al trabajar sobre una sola página, las actualizaciones suelen ser más rápidas y menos propensas a generar errores.
Limitaciones que conviene tener en cuenta:
- SEO más complicado: con una única URL, el posicionamiento orgánico se concentra en menos palabras clave. Si tu estrategia requiere cubrir muchos términos, un multi-page ofrece muchísimo más margen.
- Menos espacio para contenido extenso: aunque se puede añadir bastante información, no es la mejor opción si tu web necesita secciones muy desarrolladas, como catálogos grandes o blogs.
- Carga inicial más pesada: al meter todo en una sola página, esta puede tardar más en cargar si no optimizas bien imágenes y elementos. Y ya sabes, la paciencia online es limitada.
- Difícil de escalar: si en un futuro quieres ampliar secciones o añadir funcionalidades complejas, puede que el formato se te quede pequeño y toque rehacer la web.
- No siempre es lo que el usuario espera: en ciertos sectores, el visitante está acostumbrado a encontrar un menú con apartados claros. Si no lo ve, puede que perciba la web como "incompleta".
¿Cuándo conviene elegir una one page?
Después de ver las ventajas y las limitaciones, llega la gran pregunta: ¿en qué casos merece la pena apostar por una one page y no por una web tradicional?
No hablamos de modas aquí, pero sí se trata de entender qué tipo de proyectos sacan más partido a este formato y cuándo es mejor buscar otra alternativa.
Proyectos con un mensaje claro y directo
Si tu objetivo es transmitir una idea sin dispersarte, el formato one page es para ti.
Tienes la opción de hacer portfolios creativos, páginas de presentación de un producto, para potenciar tu marca personal o campañas puntuales funcionan de maravilla porque concentran la atención y evitan que el usuario se pierda entre enlaces.
Eventos y lanzamientos con fecha cerrada
Congresos, festivales, estrenos. Todo lo que tenga una duración limitada encaja bien aquí. El usuario entra, encuentra la información esencial: fecha, lugar, programa… y puede registrarse o comprar entradas sin dar más vueltas.
Negocios pequeños o proyectos personales
Cuando no necesitas decenas de apartados, este diseño simplifica las cosas y ahorra costes. Aquí podemos incluir a los negocios que van de fotografía, o incluso un despacho de abogados. Algo más reducido, pueden transmitir todo lo necesario en una sola página bien estructurada.
Campañas de marketing y promociones
Aunque no sea lo mismo que una landing page, una one page puede cumplir una función similar si quieres contar una historia completa que acabe en una conversión: presentar el problema, mostrar tu solución, reasegurar al cliente y cerrar con una llamada a la acción clara.
Productos o servicios con poco contenido técnico
Si lo que ofreces no requiere largas explicaciones ni documentación compleja, es perfecto. Por ejemplo: un gimnasio que presenta sus clases, servicios, precios y horarios, o una app que quiere mostrar sus funciones principales y facilitar la descarga.
Eso sí, si tu proyecto necesita un blog, o tienes un catálogo muy amplio, este formato se puede quedar corto. En esos casos, mejor ir sobre seguro con una estructura multi-page que te permita crecer, pero sin limitarte.
Elementos clave de una web one page efectiva
Una one page puede ser muy vistosa, pero más allá de que sea bonita, hay elementos que no pueden faltar.
Navegación por anclas y estructura fluida
En una web tradicional, el menú te lleva a distintas páginas. Aquí, todo ocurre en la misma, así que la navegación por anclas es tu mejor aliada. Se trata de esos enlaces que, al hacer clic, te llevan directo a la sección que quieres ver, sin recargar nada.
La clave está en que sea precisa, bien hecha. Que el usuario tenga cada bloque bien diferenciado y etiquetado, de forma que pueda ir de "Servicios" a "Contacto" en nada de tiempo.
Un truco que funciona muy bien es fijar el menú en la parte superior, de modo que siempre esté visible. Y si quieres ir sobre seguro, añade también un botón flotante para volver arriba. Son pequeños detalles que hacen que la experiencia sea mucho más cómoda.
Llamadas a la acción y flujo de conversión
En una one page, todo está en un único recorrido, así que no puedes dejar las llamadas a la acción (CTA) solo para el final. Colócalas de forma estratégica a lo largo de la página, justo después de cada bloque importante, para aprovechar el momento en que el usuario está más receptivo.
Por ejemplo: tras explicar un servicio, añade un botón de "Solicitar presupuesto" o "Reserva tu plaza ahora". Así, el lector no tiene que volver atrás ni buscar cómo contactar.
El flujo de conversión debe sentirse natural. Piensa en la página como una historia: primero captas la atención, luego generas interés, después resuelves dudas y, cuando el visitante está convencido, le facilitas la acción. Ni antes ni después.
Optimización para móviles y velocidad
Hoy en día, más de la mitad de las visitas llegarán desde un móvil. Si tu one page no está bien adaptada, perderás usuarios antes de que lean el primer párrafo.
Esto significa textos legibles sin hacer zoom, botones fáciles de pulsar, facilidad para moverse por la web y un diseño que se reorganice de forma lógica en pantallas pequeñas.
La velocidad también cuenta, y mucho.
Al concentrar todo el contenido en una sola página, si no optimizas imágenes, scripts y vídeos, la carga se puede eternizar. Y eso es un billete de ida al botón de "cerrar pestaña".
Algunas herramientas tales como Google PageSpeed Insights o GTmetrix pueden ayudarte a detectar qué está ralentizando tu web… y lo más importante, cómo arreglarlo.
Por eso es que un diseño adaptado y una carga rápida ya no son opcionales (y nunca lo fueron, vaya), son la base para que el resto del trabajo tenga sentido.
¿Cómo crear una web one page paso a paso?
Si ya tienes claro al crear tu web, que tu proyecto encaja con el formato one page, toca remangarse y empezar a construirla.
La clave está en que cada paso sume y que el resultado sea visualmente cuidado, pero que aporte.
Planifica el contenido y la jerarquía
Te recomendamos apostar por Elementor o cualquier builder de calidad, pues ya tienen plantillas para esto. Antes de pensar en colores o tipografías, define qué vas a contar y en qué orden. En una one page no hay margen para despistarse: cada bloque lleva al siguiente y el recorrido tiene que fluir.
Piensa en el usuario que entra desde cero: ¿qué necesita saber primero? ¿Qué le dará confianza? ¿Cuándo estará listo para dar el paso?
Lo normal es empezar con una propuesta clara en el primer pantallazo, seguir con beneficios y pruebas de credibilidad, y cerrar con un contacto o compra fácil.
Un buen truco es hacer un esquema en papel con los apartados en orden. Es simple, pero te ayuda a verlo todo de un vistazo y evitar que la página acabe siendo un collage sin sentido.
Diseña cada sección con intención
Aquí no hay "por si acaso" ni bloques decorativos. Cada sección debe tener un objetivo: informar, reasegurar, convencer o hacer que el usuario actúe.
Si hablas de servicios, deja claro por qué contigo y no con otro. Si pones testimonios, que sean reales y que digan algo más que "me encantó". Y si incluyes un formulario, ponlo cuando el visitante ya esté convencido, no antes.
A nivel de diseño, cuida la coherencia. Tienes que conservar los mismos estilos de botón, paleta de colores consistente, diseño y tipografías legibles. Un acabado limpio no solo se ve mejor, sino que también ayuda a que el mensaje cale.
Implementa buenas prácticas de diseño UX
La experiencia de usuario es lo que va a decidir si alguien profundiza en tu página entera o se queda en la primera sección.
Aquí van algunas reglas rápidas:
- Menú fijo con enlaces por ancla para saltar a cada sección.
- Bloques bien diferenciados para que no parezca todo un mismo párrafo interminable.
- Espacios en blanco que den aire y eviten el agobio visual.
- Botones claros con textos que inviten a la acción ("Quiero más info", "Descargar ahora").
Piensa en el usuario más impaciente que puedas imaginar. Si él puede navegar y entenderlo todo sin esfuerzo, vas por buen camino.
Aplica técnicas básicas de SEO desde el inicio
El SEO en una one page es complicado, así que hay que trabajarlo con cabeza. Como todo tu contenido está en una sola URL, cada palabra cuenta:
- Define una keyword principal y algunas secundarias que encajen de forma natural.
- Usa los encabezados (H1, H2, H3) para estructurar y ayudar a Google a entender el contenido.
- Optimiza las imágenes con nombres descriptivos y alt text.
- Cuida la velocidad de carga: comprime imágenes, minimiza scripts y evita elementos que ralenticen.
Si lo montas bien desde el inicio, no tendrás que hacer un "parche" después para que posicione. Pero ya te decimos que one page y SEO no se llevan bien.
¿Cómo hacer una one page en WordPress?
Tener una web en WordPress es, para muchos, la opción más práctica. Y si encima quieres montar una one page, el combo es total: flexibilidad, cientos de plantillas pensadas para este formato, agilidad y una comunidad enorme detrás que te facilita cualquier ajuste.
Lo importante es saber qué herramientas elegir y cómo configurarlas para que el resultado sea el mejor, y el que más te convenga.
Temas recomendados para este tipo de diseño
El tema es la columna vertebral de tu one page. No todos están pensados para este formato, así que conviene buscar plantillas que incluyan navegación por anclas, secciones modulares y compatibilidad total con builders como Elementor o Gutenberg.
Algunas opciones que funcionan muy bien:
- Astra: rápido y con plantillas one page listas para importar. Además, se integra de maravilla con Elementor y otros maquetadores.
- OceanWP: muy personalizable, ideal si quieres controlar hasta el último detalle del diseño.
- Neve: minimalista, con tiempos de carga muy bajos y preparado para SEO desde el principio.
- Hestia: perfecto para negocios y portfolios, con scroll suave y un diseño moderno.
Un consejo antes de instalar: revisa la demo oficial y comprueba si la estructura encaja con lo que quieres.
Plugins útiles para estructura y navegación
La magia de una one page está en la fluidez. El usuario debe pasar de una sección a otra sin cortes, y aquí es donde algunos plugins para one page marcan la diferencia.
- Elementor o Beaver Builder: constructores visuales que permiten maquetar por bloques arrastrando y soltando. Ideales si no quieres pelearte con código.
- Menu Anchor (integrado en Elementor): crea anclas para que, al hacer clic en el menú, el usuario salte directo a la sección deseada.
- Sticky Menu on Scroll: mantiene el menú fijo en la parte superior, algo clave para no perder la navegación mientras se hace scroll.
- Smush o ShortPixel: reducen el peso de las imágenes sin perder calidad, mejorando así la velocidad de carga.
Aquí aplica la regla de oro: menos es más. Instalar demasiados plugins solo "por si acaso" puede hacer que la web vaya lenta o que haya conflictos entre ellos.
Consejos para rendimiento y posicionamiento
Una one page en WordPress puede ser muy rápida y escalar bien en buscadores si cuidas dos aspectos: rendimiento y SEO técnico.
- Optimiza la carga: elige un hosting fiable, activa la caché (WP Rocket, W3 Total Cache o LiteSpeed Cache son buenas opciones) y limita los scripts pesados.
- Diseño responsive real: no se trata solo de que el contenido "encaje" en móvil, sino de que cada bloque se reorganice de forma lógica y mantenga la legibilidad.
- Encabezados claros: un H1 único para el título principal y el resto organizado con H2 y H3. Esto ayuda a Google a entender el contenido y mejora la accesibilidad.
- URLs y metadatos optimizados: aunque tengas una sola página, define un título y una meta descripción atractivos para aumentar el CTR en los resultados de búsqueda.
- Carga diferida de imágenes y vídeos (lazy load): así el navegador solo descarga lo que el usuario está viendo en ese momento, acelerando la experiencia al ver imágenes.
Ejemplos inspiradores de sitios one page
Nada como ver casos reales para entender hasta dónde puede llegar una one page bien hecha.
No se trata de diseño solamente, sino de cómo se combinan el contenido y la experiencia al usuario, para que sea coherente y que aquel que entre, no le falte nada al recorrer la web.
Aquí tienes algunos referentes gigantes que demuestran que este formato, bien trabajado, es ideal.
- Spotify Design
Fíjate en el trabajo del equipo de diseño de Spotify. Usa secciones limpias, tipografía muy cuidada, todo fluye y tiene un scroll que engancha. Cada bloque tiene un propósito claro, y las animaciones sutiles hacen que quieras seguir bajando.
Es el ejemplo perfecto de cómo una one page puede transmitir una identidad de marca sólida sin saturar. - Apple y sus productos destacados
Apple no siempre usa one page para todo, pero cuando presenta un producto nuevo, apuesta fuerte por este formato.
La página del iPhone o del MacBook, por ejemplo, es un viaje guiado: imágenes a pantalla completa, datos técnicos bien integrados, posibilidades del producto y llamadas a la acción en los puntos exactos. Esto es ir sobre seguro cuando buscas impacto y conversión. - Airbnb: experiencias especiales
En campañas puntuales, Airbnb crea one pages dedicadas a experiencias o destinos concretos. La clave está en que el contenido se presenta en un orden que despierta interés: primero la historia, luego las fotos inspiradoras, después los detalles y, por último, el botón de reserva. Directo y sin rodeos. - Species in Pieces
Este proyecto educativo sobre especies en peligro combina ilustraciones geométricas animadas con datos claros.
Es un recordatorio de que una one page no tiene que ser siempre corporativa: puede tener un fin divulgativo y, aun así, mantener un diseño espectacular que invite a compartir. - Porsche: lanzamientos de modelos
Cuando Porsche presenta un nuevo modelo, su one page es un espectáculo visual. Vídeos de alta calidad, transiciones suaves y una narrativa que mezcla historia, prestaciones y sensaciones. No es solo un catálogo: es una experiencia que conecta con el público objetivo desde la primera pantalla.
Conclusión: ¿El diseño one page es adecuado para tu web?
Después de todo lo que hemos visto, ya tienes las cartas sobre la mesa para decidir si una one page es lo que tu proyecto necesita.
Es un formato que luce y hace mil veces más fácil el recorrido del usuario, pero que también tiene sus límites si buscas algo más amplio o con mucho contenido dinámico.
Lo importante es que la elección no sea por moda, sino porque encaja con tus objetivos y con lo que quieres transmitir. Y si decides dar el paso, en Raiola Networks te lo ponemos fácil con nuestro hosting WordPress optimizado, perfecto para que tu one page vaya fluida y con el rendimiento que esperas.